Las especies de amaranto fueron cultivadas por los aztecas hace 5.000 a 6.000 años, antes de la destrucción de la civilización sudamericana por los conquistadores españoles.
El amaranto es una gran fuente de aminoácidos esenciales. Una taza de amaranto crudo contiene 28.1 gramos de proteína. En comparación, 1 taza de arroz blanco crudo contiene 13.1 gramos de proteína. No solo eso, la proteína en las "albúminas" y "globulinas" del amaranto, hacen una fuente excelente de proteínas de alta calidad.
El amaranto ayuda a salvar vidas; ¡literalmente! El grano ha sido parte de numerosos estudios para enfermedades cardiovasculares, como la cardiopatía coronaria y la hipertensión.
El amaranto es una gran alternativa al trigo. Además, el amaranto también es mucho más saludable y nutritivo que el trigo común por sus increíbles propiedades, por lo que incluso si no sufre de intolerancia al gluten, existen muchas razones positivas para implementar este súper grano en su dieta.